Los partidos de izquierda en el Parlamento de Francia presentarán el próximo lunes una moción de censura contra el Gobierno a causa de su gestión de la crisis de los chalecos amarillos y para mostrar que «otra vía es posible».
Según el primer secretario del Partido Socialista, Olivier Faure, la moción de censura tiene el apoyo de Francia Insubmissa (izquierda radical) y del Partido Comunista, aunque desean que otros grupos se sumen a su iniciativa en la Asamblea Nacional, el gobierno cuenta con mayoría absoluta.
En una entrevista con la prensa, Faure explicó que los tres grupos «buscarán en los próximos días la ampliación del número de partidos que se sumen a la moción», que tiene escasas posibilidades de prosperar debido a la cómoda mayoría absoluta que tiene el partido del gobierno.
Consciente de ello, el líder socialista se preguntó: «¿Para qué sirve? Para demostrar que otra vía es posible (…) Hay una finalidad común, que la justicia sea más firme».