Hasta el momento el oficialismo reclama y se muestra cauto, todavía no se cuentan con datos oficiales, de acuerdo al boca d urna la oposición se adjudica una victoria contundente y el Frente de Todos estaría ganando por un amplio margen.
El oficialismo esta mostrando alarma y cautela en su bunker, aunque crece el pesimismo y claramente con un gran silencio asumen el triunfo de la fórmula Alberto Fernández – Cristina Kirchner.
A ciencia cierta, se esperan datos oficiales, que hasta el momento no se confirman a fin de conocer las diferencias concretas.
Tras llegar al bunker Alberto Fernández dio una pocas palabras, pero precisas en cuanto a que marcan el optimismo generalizado en el kirchnerismo: «Quedamos cómodos para salir primeros».
Sin datos oficiales, al menos hasta ahora , desde ambos comandos de campaña admiten que como se preveía, la elección se polarizó y que el Frente de Todos fue el más votado. «Dos tercios de la Argentina le ha dicho que no a este gobierno», dijo Santiago Cafiero, uno de los encargados de la campaña de Fernández.
Desde el oficialismo, minutos después de las 19, el jefe de Gabinete Marcos Peña, se mostró satisfecho con la performance electoral del oficialismo y dijo: «Hemos hecho una muy buena elección». De todas maneras, ya apuntando a las generales del 27 de octubre, reconoció que desde este lunes intentarán convencer a los votantes que se inclinaron por otras opciones. «En 2015 y 2017 crecimos mucho respecto de las PASO», recordó el macrista.
¿Cuál es la diferencia que maneja cada fuerza? En el búnker kirchnerista confían en una distancia «de al menos 7 puntos» y en el oficialismo la ubican «entre 3 y 4». En base a esos primeros datos, reina la alegría en el espacio opositor y la prudencia en el macrismo.
En Casa de Rosada creen que una diferencia menor a los cinco puntos es reversible en las generales. Si es mayor y la fórmula Fernández – CFK supera a los 40 puntos, estará más cerca del número «mágico» para ganar en primera vuelta, sin necesidad de recurrir al balotaje.
El resultado en las provincias del centro, las más importantes por cantidad de electores, será otra de las claves. Datos extraoficiales marcan triunfos del kirchnerismo en Buenos Aires y Santa Fe, y victorias del macrismo en la Ciudad de Buenos Aires y Córdoba. En Mendoza, la pelea es muy ajustada y polarizada, ya que ambas fuerzas oscilarían en los 40 puntos cada una.
Vía: El sol de Mendoza.
