Los bancos privados nacionales destacaron que la presión tributaria sobre la actividad bancaria creció en forma sostenida desde 2009, según un informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea.
La suma de impuestos municipales, provinciales y nacionales encarecen un 44% el Costo Financiero Total (CFT) de los préstamos bancarios a empresas y familias en promedio, según un informe del Instituto de Estudios sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (Ieral) de la Fundación Mediterránea encargado por la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba).
Las entidades destacaron que la presión tributaria sobre la actividad bancaria creció en forma sostenida desde 2009, especialmente en casos de gobiernos provinciales y municipales, lo que explicaría, entre otros factores, que el porcentaje de los préstamos bancarios sobre el PBI esté en torno al 10%, “el más bajo de la región”.
“Es hora de analizar la forma de bajar la carga que Nación, provincias y municipios le imponen a las empresas y personas que toman créditos y usan servicios financieros”, dijo Javier Bolzico, el presidente de Adeba, la asociación que nuclea a los bancos privados.
De acuerdo al informe, el peso de los tributos que gravan directamente el crédito explica entre el 4,5% (en el caso de créditos hipotecarios de vivienda única) y el 30,5% (crédito personal y resto de crédito hipotecario) del Costo Financiero Total (CFT), producto de gravámenes como el IVA, impuesto a los débitos y créditos bancarios (IDCB), impuesto provincial de sellos (IS), impuesto provincial sobre los ingresos brutos (IIBB) y la tasa municipal por inspección de seguridad e higiene (TISH).
“Los impuestos nacionales cobran mayor importancia en los créditos personales y en los créditos hipotecarios que no son destinados a vivienda única, por el peso del IVA en los intereses (no se puede usar como crédito fiscal). En tales casos, los impuestos nacionales representan un 61,9% del impacto de los impuestos en el costo del crédito, mientras los provinciales explican un 25,4% y los municipales un 12,7%”, señaló el documento.
“En cambio, los impuestos provinciales explican la mayor parte del peso de los tributos en el CFT (55,1%) en el caso de los créditos a empresas (prestatario puede usar el IVA de los intereses como crédito fiscal)”, aseguró el informe.
El peso de los tributos que gravan directamente el crédito explica entre el 4,5% (en el caso de créditos hipotecarios de vivienda única) y el 30,5% (crédito personal y resto de crédito hipotecario) del Costo Financiero Total (CFT)
Uno de los puntos que destaca el documento es que, sólo en concepto de impuestos sobre créditos y débitos bancarios (más conocido como “impuesto al cheque”), los usuarios del sistema financiero pagaron en 2021 unos 750.000 millones de pesos, una suma que “equivale más que a la suma de lo recaudado por derechos de importación, tasas estadísticas e impuestos a los combustibles”.
Por último, en un apartado sobre el acceso al crédito bancario de mipymes en la región, el peso de los impuestos en el CFT alcanza el 59,8% del costo de adquirir un préstamo para las empresas argentinas, mientras que en Brasil es un 33%, en México un 26,3%, en Chile un 19,2% y en Paraguay sólo un 16,7 por ciento.
“Estas diferencias se explican principalmente por la presencia de impuestos distorsivos en nuestro país (impuesto a los ingresos brutos, a los sellos, a los débitos y créditos), que no existen o son poco relevantes en el resto de los países estudiados”, afirmó el documento.