Sólo el año pasado en el hospital San Vicente de Paul, de la fronteriza localidad de San Ramón de la Nueva Orán, se atendieron más de 31 mil extranjeros. Desde que se difundió la noticia en Bolivia, se reduco notablemente la concurrencia de ciudadanos bolivianos al hospital argentino.
El gerente del hospital San Vicente de Paúl, el doctor Alejandro Valenzuela, señaló que están esperando la orden del Ministerio de Salud para comenzar a cobrar a los extranjeros, quienes ya comenzaron a mermar su presencia en el nosocomio, advertidos que deberán pagar las prestaciones.
El decreto de necesidad y urgencia firmado por el gobernador Gustavo Sáenz, disponiendo el arancelamiento de la atención en hospitales público a extranjeros no residentes en Salta, estuvo en todos los portales de la región.
Valenzuela dijo que, “estamos esperando la reglamentación arancelaria con la que el Ministerio habilita a que se ejecute, cuando lleguen las indicaciones correspondientes se comenzará a aplicar”, aseveró.
El gerente indicó que los fondos que ingresarán por el cobro serán significativos, pues implica un cuadro arancelario en cada práctica. “A nada, ya representa un costo importante, para nosotros es un alivio, ponemos una condición que nos es conveniente, ayudará en la parte presupuestaria y de insumos”, indicó subrayando que el cobro será al momento de la atención pues “el paciente llega caminando, no es de urgencia, cuando pase por admisión deberán abonar”.
Por último, mencionó que, llegada la noticia a Bolivia del cobro, se evidenció una notoria merma en la cantidad de extranjeros en el hospital pidiendo atención. “Nosotros el año pasado tuvimos en todo concepto aproximadamente más de 31.000 atenciones, hablamos de consultas en el área operativa por estudios complementarios, operaciones, cirugías, tuvimos 44 partos por ejemplo; también es una realidad que, desde que se publicó la medida, cayó estrepitosamente (la demanda), muy pocos vienen a consultar”, concluyó.
