La justicia peruana había ordenado la prisión preventiva al expresidente peruano Alan García, como resultado de una profunda investigación por corrupción que se lleva adelante en ese país por el caso Odebrecht.
Cabe recordar que Alan García, fue presidente de Perú entre 1985 -1991 y 2006-2011 y en el día de la fecha la justicia ordenó su detención inmediata, al llegar las fuerzas de seguridad a su domicilio, para hacer efectivo su arresto, se quito la vida a los 69 años de edad, de un disparo en la cabeza para evitar ser detenido.
Tras lo acontecido, fue trasladado de urgencia a una clínica donde fue intervenido quirúrgicamente, y estando en quirófano sufrió tres paros cardíacos,así lo confirmó la ministra de salud, Zulema Tomás
En el momento de la detención García, expresidente de Perú entre 1985-90 y 2006-2011, fue acorralado por los agentes en su vivienda del limeño distrito residencial de Miraflores hacia las 6.30, hora local.
Según el ministro del Interior, Carlos Morán, «previa identificación, los agentes ingresaron al interior del inmueble. El equipo comunicó al señor García, que se encontraba en unas escaleras que dan al segundo piso de la casa, sobre la ejecución de esta medida judicial”.
“El expresidente indicó de que iba a hacer una llamada telefónica a su abogado, ingresó a su habitación y cerró la puerta tras de él. A los pocos minutos se escuchó el disparo de un arma de fuego. La Policía forzó el ingreso, encontró al señor García en posición de sentado y con una herida en la cabeza”, añadió.
Antes de emitirse la orden de detención, García había declarado el martes que no se asilaría ni escondería, en clara alusión al frustrado asilo que pidió a Uruguay en diciembre. La justicia dictó en ese mes 18 meses de impedimento de salida del país.